Los bahá’ís celebran el Naw-Rúz, que significa día de año nuevo, el primer día de la primavera en el hemisferio norte, el equinoccio invernal. Representa «el Día de Dios», el momento en que ocurre un re-despertar del espíritu y la luz de una nueva revelación brilla igualmente sobre la totalidad de la creación de Dios. Nuevo Año Bahá’í de 177 después de la proclamación del Bab en 1844.