CRÓNICA
Más de 40 personas de diferentes procedencias (León, Madrid, Alicante, País Vasco, Zaragoza, Marruecos…) nos reunimos en el monasterio de benedictinas Santa María de Carbajal de León con motivo del encuentro interreligioso que con el lema Oportunidades para la unidad y desafíos había sido convocado por el DIM y otras entidades (DIR, Pequeña tierra, FEIR).
Este encuentro estuvo precedido por una conferencia impartida el martes 3 de junio en el centro de actividades de la Institución Teresiana por el hermano John Martin Kuverapu Sahayananda, monje benedictino camaldulense del ashram Shativanam. En este evento participó también Samad Ouyhia Kharraz, presidente de la asociación Titawin y de la Comunidad islámica La paz de León quien compartió con los asistentes varias informaciones sobre la presencia de fieles musulmanes en nuestra ciudad y su experiencia de intercambios con la Comunidad católica.
Los días 4 y 5 de junio, ya en el monasterio, el hermano John Martin ofreció sus conocimientos y reflexiones sobre diferentes religiones profundizando en particular en la visión de los libros sagrados del Hinduismo en relación con Jesucristo. Nos animó a buscar la verdad con una mente y un corazón abiertos y destacó la importancia del diálogo entre las religiones como aportación imprescindible para construir la paz.
El viernes 6 de junio una mesa redonda convocó a varios participantes en el encuentro quienes compartieron información y vivencias de diversas realidades relacionadas con la espiritualidad y el diálogo interreligioso: Zen Sambo Kyodan, Fraternidades de Foucauld, Amigos del desierto, Equipo ecuménico Sabiñánigo, Religión Bahai, ECUDIR, Escuela del Silencio, Comunidad del Arca, DIM, Mesa Interreligiosa de Alicante, IEF. Las preguntas de los asistentes animaron el intercambio.
Para poner el broche de oro, una oración interreligiosa nos reunió en la iglesia del monasterio. Se leyeron textos breves de diferentes religiones acompañados de música y canciones.
Este encuentro interreligioso celebrado en León regaló a los participantes la alegría de una armónica convivencia y la apertura a la diversidad.
Y así nos despedimos esperando que el próximo año podamos volver a vernos e invitar a otros muchos.