José (heb. יוסף הקדוש) fue, en el cristianismo y según diversos textos neotestamentarios, el esposo de María, la madre de Jesús de Nazaret y, por tanto, padre putativo de Jesús. Según el Evangelio de Mateo, era de oficio artesano (en el original griego, «τεχτων»; Mateo 13:55a), lo que ya en los primeros siglos del cristianismo se concretó en carpintero, profesión que habría enseñado a su hijo, de quien igualmente se indica que era «artesano» (Marcos 6:3a). Era de condición humilde, aunque las genealogías de Mateo 1:1-172 y Lucas 3:23-383 lo presentan como perteneciente a la estirpe del rey David.