Esta es la ocasión en que los bahá’ís celebran la Fiesta de «Ridván» (Paraíso), nombre por el que se conoce al jardín donde Bahá’u’lláh permaneció doce días y donde se realizó su declaración como el Profeta universal.
Podemos leer en los “Pasajes de los Escritos de Baha’u’llah”.
“Te hemos escogido a ti para que seas nuestra poderosísima Trompeta, cuyo toque anunciará la resurrección de toda la humanidad.»