La fecha del inicio de Ramadán es variable según los países, en función de la observación de la luna.
El ayuno de Ramadán corresponde al noveno mes del calendario de la Hégira. Prescrito en el Corán, es uno de los cinco pilares del Islam. El ayuno del Ramadán requiere que todos los musulmanes sanos y adultos se abstengan de toda comida ni bebida, ni ninguna sustancia y no tener relaciones sexuales desde el amanecer hasta el atardecer. Están previstas excepciones y aplazamientos a un período posterior para viajeros, mujeres embarazadas y, por supuesto, para los enfermos.
Habitualmente los musulmanes se encuentran al anochecer para romper el ayuno. Seguido de una comida a la que se recomienda invitar a los más pobres. Ramadán es para los fieles un esfuerzo sobre sí mismo que asocia cuerpo, corazón y espíritu con la preferencia por marcar la prioridad que uno debe a Dios. Termina con la fiesta de romper el ayuno (Eid al-Fitr), donde a los musulmanes les gusta reencontrarse en la alegría del esfuerzo hecho por Dios.